Extraños son los caminos del destino,
había planeado no enamorarme,
guardar mi corazón en un cajón bajo llave,
y de pronto te tenía frente a mí
con una rosa blanca y una ingenua sonrisa.
y no pude más que dejarte entrar
ofrecerte mi corazón a un lastimado
pero lleno de esperanza al verse en tus
ojos reflejado.
En un abrazo timido y tembloroso,
sincronice mi corazón al tuyo,
quise el tiempo fuera eterno
y poder detenerlo.......
No hay comentarios.:
Publicar un comentario