Amores perdidos en el tiempo, amores deseosos sin embargo muertos,
amores que alguna vez aspiraron a la eternidad y hoy no son más que
un pasado recurrente o una cama caliente.
Amores que hoy desearían una oportunidad,
una razón más para ser amor y no solo una pasión pasajera,
de pasiones pasajeras están llenas las camas,
mientras se vacían las almas de la tibieza de un amor paciente.
Hoy entre nosotros no existe más que dos cuerpos
que se aferran a pertenecerse en medio de un caos de viejos
pensamientos y las tumbas de sentimientos que alguna vez nos
llenaron.
Mi cuerpo se complementa con el tuyo,
Embonamos como una mancuerna perfecta,
Pero lo que nos unía ha muerto y no parece tener
Esperanzas de renacer en medio de esta soledad y
Nuestra renuencia a ceder un poco de paz.
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